El actor español Antonio Banderas derribó la casa que compró en Marbella (sur de España) a mediados de los 90, y donde vivió parte de la época en la que estuvo casado con la actriz norteamericana Melanie Griffith, tras años de litigios judiciales para conservarla.
Banderas adoptó esta decisión para zanjar la situación irregular en la que estaba el inmueble, según confirmaron a EFE fuentes municipales.
El problema principal del edificio era que la licencia de construcción de la propiedad, edificada en 1995 y comprada dos años después por Antonio Banderas, era ilegal, de manera que fue anulada por la justicia.
Una primera sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía en 2003 dejó sin efecto el permiso municipal de obras de 1995. El motivo es que la casa ‘La Gaviota’ se había construido sobre una parcela calificada como ‘equipamiento sanitario’.
Además, explicaba el auto en cuestión, la propiedad de Banderas -ubicada en una exclusiva urbanización- invadía la zona de dominio público marítimo-terrestre.