El divorcio entre Jennifer Lopez y Ben Affleck quedó oficialmente finalizado este lunes 6 de enero, casi cinco meses después de que la cantante presentara la solicitud para terminar su matrimonio de dos años. Según el documento oficial, la pareja se separó el 26 de abril de 2024 y logró diversos acuerdos económicos, entre los que destaca que López conservará el anillo de compromiso de 8,5 quilates, valorado en más de 5 millones de dólares.
De acuerdo con documentos judiciales obtenidos por Page Six, Jennifer Lopez no solo retendrá el icónico anillo de diamantes verdes, considerado una pieza exclusiva en el mercado de lujo, sino también sus ingresos generados después de la separación y la mitad de los fondos de dos cuentas bancarias compartidas con Ben Affleck. Asimismo, la artista renunció a cualquier derecho a una pensión conyugal en el futuro.
Por otro lado, Ben Affleck conservará la propiedad total de su compañía de producción, Artists Equity, fundada en 2022 junto a Matt Damon, además de sus ganancias posteriores a la fecha de separación. Ambos acordaron dividir las ganancias obtenidas por la venta de su mansión en Beverly Hills, cuyo valor asciende a 60 millones de dólares.
Cabe destacar que el anillo de compromiso lleva grabada la frase “not going anywhere” (no voy a ningún lado), un detalle que, según Jennifer Lopez, hace referencia a cómo Affleck solía firmar sus correos electrónicos cuando retomaron su relación en 2021, como ella misma compartió en una entrevista con Zane Lowe para Apple Music One.
Mike Fried, director ejecutivo de The Diamond Pro, comentó a Page Six que “un diamante verde de esa magnitud es extremadamente raro y supera en valor al anillo de compromiso anterior”. Según el experto, la pieza podría valer más de 10 millones de dólares, pese a que su estimación inicial ronda los 5 millones.
Además, una fuente reveló a la revista OK que Jennifer Lopez nunca tuvo intención de devolver el anillo y que Ben Affleck está de acuerdo con esa decisión. La actriz también conserva el primer anillo de compromiso que el actor le dio durante su relación inicial entre 2002 y 2004.
“Fue un regalo. El hecho de que su relación no funcionara no significa que deba devolverlo. Jennifer no siente remordimientos por conservarlo, y está claro que a Ben no le importa. ¡Ya lo ha hecho dos veces! Él sabía perfectamente en qué se estaba metiendo”, aseguró la fuente.
