A lo largo de la historia política dominicana, ha habido una serie de líderes que han desempeñado roles significativos en la vida nacional, y los comediantes han sido responsables de representar a los personajes más destacados en el ámbito estatal y político.
Durante el último mandato del doctor Joaquín Balaguer (1974-1978), el humor político emergió, particularmente en el programa de televisión «El Show del Mediodía», como una forma de criticar y llamar la atención sobre la complicada situación política del país.
Felipe Polanco (Boruga) realizaba una imitación magistral del fallecido político José Francisco Peña Gómez, principal opositor del presidente Balaguer, mientras que este último era personificado con precisión por Cuquín Victoria.
Para encarnar al personaje, Felipe se oscurecía la piel por completo y lograba emitir una voz fuerte y convincente, similar a la de Peña Gómez, mientras que Cuquín se valía de un saco, sombrero y característicos lentes. Con una voz tranquila y un paso lento, el humorista logró una de las mejores imitaciones del líder político.
Con el paso de los años, la escena política presentó nuevos actores gubernamentales, y el humor también evolucionó en consecuencia.
En los últimos tiempos, una nueva generación de comediantes ha sabido retratar con gracia, profesionalismo y agudeza a los políticos que dominan el panorama estatal.
Actualmente, Rafael Bobadilla ha destacado con sus interpretaciones de Danilo Medina, a quien encarna de manera completa. Bobadilla también imita a otros líderes políticos como el presidente Luis Abinader, Hipólito Mejía, Miguel Vargas, David Collado, Leonel Fernández y Antonio Marte.
La actriz y comediante Jacqueline Estrella ganó popularidad al interpretar a Margarita Cedeño en el programa de televisión «La Opción de las 12». Andrés Martínez, conocido como «Cacheíto», también recibió la atención del público por su memorable imitación del expresidente Leonel Fernández, así como por sus caracterizaciones de Danilo Medina y Miguel Vargas.
Oscar Pérez, otro talentoso intérprete de personajes políticos, ha retratado a la perfección a figuras como Miguel Vargas Maldonado, Hipólito Mejía, Leonel Fernández y Danilo Medina.
Además, el comediante Adriano Peña, conocido como «El Gallito», ha logrado caracterizaciones exitosas de Hipólito Mejía y del periodista Guillermo Gómez.
Juan Carlos Pichardo ha asumido el papel del presidente Luis Abinader, llevando sus imitaciones al escenario, las redes sociales, programas de radio, televisión y YouTube.
Cuando el público observa a estos personajes con sus rasgos físicos, voz y gestos destacados por los comediantes, quizás olvida el tiempo y esfuerzo dedicados a la preparación y estudio de las figuras.
Jacqueline Estrella, por ejemplo, estudió cuidadosamente las expresiones de Margarita Cedeño durante la campaña presidencial junto a su esposo, Leonel Fernández. Dada la similitud física entre Estrella y Cedeño, como su tamaño, rostro, dentadura y sonrisa, logró personificarla con facilidad.
Por otro lado, Rafael Bobadilla se concentró en captar los gestos característicos de Miguel Vargas y Danilo Medina, como el hecho de que Miguel siempre baja la cabeza al hablar, así como el tono de voz y los ademanes de Danilo. Bobadilla también se inspiró en la personalidad y el tono de voz de David Collado para su imitación. Es fundamental que los políticos tengan una personalidad y un tono de voz reconocibles que puedan ser adaptados al humor. Por ejemplo, Bobadilla no imita al candidato Abel Martínez debido a que carece de un tono de voz distintivo.
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